Declaración final de la Conferencia Internacional de Paz de Roma

28 octubre 2023

Delegados de 40 organizaciones e individualidades de 25 países se reunieron en Roma los días 27 y 28 de octubre de 2023 para discutir las causas de la actual guerra en Ucrania, el impacto de la guerra en la paz internacional, los peligros que enfrenta nuestro pueblo y las tareas del movimiento por una paz justa y permanente.
 
Nuestras conclusiones:

• Las políticas agresivas de Estados Unidos y sus aliados más cercanos (Occidente) son la causa fundamental de la guerra en Ucrania y, como vemos en Palestina, está empujando a la Humanidad al borde de una tercera guerra mundial.
• Para mantener un orden mundial unipolar, Occidente necesita la dominación imperialista. Su objetivo es transformar a la gran mayoría de los países del mundo en Estados vasallos, conduciendo a un sistema internacional neocolonial.
• La élite imperialista utiliza la máscara ideológica pseudoprogresista de la “globalización democrática”, la defensa de los derechos humanos y civiles y la superación de los Estados nacionales como pretexto para su dominación. Utilizan instituciones como la UE, el Banco Mundial, el FMI y el FME para imponer la dominación económica, y la OTAN para imponer la dominación militar.

En este marco, Occidente:

• Ataca a Rusia con el objetivo claro de destruirla como Estado soberano y dividirla en un conjunto de estados vasallos débiles.
• Rodea a China con bases militares, buques de guerra y nuevas alianzas militares; intensifica los envíos de armas a Taiwán y continúa las provocaciones en el Mar de China Meridional para obligar a China a una respuesta militar que pueda utilizarse como pretexto para la guerra.
• Continúan las provocaciones bélicas en torno a la península de Corea.
• Apoya a Israel, su principal instrumento para su política neocolonial en Oriente Medio, con el fin de extinguir al pueblo palestino y obligar a Irán a la guerra.
• Mantiene la ocupación de Irak, mantiene los conflictos en Yemen, Siria, Libia, Líbano – y sobre todo continúa la ocupación de Palestina.
• Saquea constantemente África y América Latina mientras impone gobiernos títeres e instiga a sus estados vasallos a invadir países independientes, por ejemplo en el Sahel.
• Emplea milicias armadas en operaciones de cambio de régimen y organiza asesinatos de intelectuales, políticos, científicos y periodistas rusos e iraníes; comete acciones terroristas como hacer estallar el Nord Stream 2.
• A través de medidas coercitivas unilaterales (CMU) ilegales, intenta estrangular las economías de los países que resisten al imperialismo, insensibles ante las consecuencias catastróficas para las poblaciones de estos países y para la clase trabajadora y todos los pobres en el propio Occidente.
• Envenena y mata. Estados Unidos ya ha utilizado armas nucleares, no sólo en Hiroshima y Nagasaki, sino también utilizando armas de uranio empobrecido (DU) contra Irak, Serbia y ahora contra Rusia. Las armas con DU contaminan permanentemente la tierra y han matado a un número aún incalculable de personas.
• Por estas razones, las elites occidentales constituyen una amenaza permanente contra la paz y
  el desarrollo del mundo y amenazan la existencia misma de la humanidad.

Nuestra postura respecto a la actual guerra en Ucrania:
 
No fue el 24 de febrero de 2022 cuando comenzó la guerra en Ucrania, ni siquiera cuando Estados Unidos incitó al golpe de 2014, sino más atrás en el tiempo, con la sangrienta expansión de la OTAN hacia Europa del Este. Las guerras sucias en Yugoslavia y la desintegración del otrora Estado balcánico más fuerte, y la instigación de guerras en el Cáucaso fueron todas fases del mismo proyecto. La guerra contra Rusia ya había comenzado inmediatamente después de la disolución ilegal de la URSS, impuesta contra la voluntad de sus ciudadanos. La formación de nuevas fronteras en Europa del Este y Asia Central se ha impuesto fuera del marco del derecho internacional.

La OTAN fue el instrumento de Estados Unidos para imponer su control sobre toda Europa. Su expansión hacia el Este fue ilegal y presenta una amenaza permanente contra todos los países soberanos e independientes.
 
El gobierno ruso intentó evitar la fase actual de la guerra, pero Occidente, a través de sus representantes en Ucrania, ha seguido atacando a las poblaciones rusas y ha rechazado cualquier acuerdo de paz basado en la igualdad de seguridad, como propone Rusia. Las acciones de Occidente hicieron que la guerra fuera inevitable.
 
La forma en que Occidente conduce la guerra muestra que apunta a una escalada interminable y a agotar al máximo tanto a ucranianos como a rusos. El uso de armas ilegales como bombas de racimo y municiones con uranio empobrecido muestra que la acción inhumana de las elites occidentales no ha tenido límites. Sus esfuerzos por involucrar a todos los países de Europa del este (así como a otros países) en el conflicto muestran que las principales élites occidentales están tratando de utilizar a la población europea como carne de cañón tal como ahora utilizan a los ucranianos.
 
La única base para resolver disputas internacionales debe seguir siendo el Derecho Internacional, cuyo núcleo es la Carta de las Naciones Unidas. La voluntad de Estados Unidos y sus aliados –el llamado “orden basado en reglas”– ya no debería ser una norma obligatoria para el mundo.
 
Lo que la gente del mundo necesita:

• Una derrota de la OTAN en Ucrania. Sin este requisito previo no hay posibilidad de una paz duradera. Una victoria occidental sobre Rusia sería un nuevo desastre para la humanidad. Se convertiría en un punto de partida para nuevas guerras en los Balcanes, Oriente Medio y Asia Oriental, especialmente en el Mar de China Meridional y la Península de Corea, es decir, una tercera guerra mundial prolongada.
• Un nuevo marco de cooperación en Europa del Este y los Balcanes, liberado del control de Estados Unidos y la UE, basado en relaciones igualitarias y reconfigurando las catastróficas consecuencias de la victoria de Occidente en la Guerra Fría.
• Un mundo de países soberanos donde los pueblos puedan determinar su futuro, libres de la dictadura económica global impuesta por Occidente, libres de medidas coercitivas unilaterales. El mundo necesita redes comerciales, financieras, de comunicaciones y de transporte libres del control de Occidente. En esta dirección, la formación de nuevas organizaciones para la cooperación entre estados, libres del control occidental, y el papel mejorado del Sur Global en las organizaciones internacionales existentes son avances positivos.
• Una nueva arquitectura en la ONU que refleje los derechos del Sur global y el principio de igualdad de soberanía para todos los Estados.

Nuestras tareas:

• Tenemos mucho que hacer en materia de información y educación. En los países de la OTAN y la UE y en otros países dominados por Estados Unidos existe una censura prácticamente total. Deberíamos informar a sus poblaciones que la guerra de Occidente en Ucrania es una guerra injusta.
• Debemos detener el envío de armas, municiones, equipos y personal al campo de batalla pero,
• Nuestra principal tarea debería ser liberar a nuestros países de la membresía en la OTAN, del control estadounidense y de las bases militares estadounidenses. Este será el pináculo de nuestra solidaridad con los pueblos que resisten en el mundo.

 
Hemos decidido:

1. Formar una red permanente para coordinar las tareas anteriores bajo el nombre de “Stop a la III Guerra Mundial—Iniciativa Internacional para la Paz”.
2. Organizar acciones internacionales y delegaciones de solidaridad a Rusia- Donbass y Palestina.
3. Organizar la segunda Conferencia Internacional de Paz a finales de 2024.