Haniyeh era una figura culta y educada que reflejaba la calidad del pueblo de Palestina. Se licenció en literatura árabe y se doctoró en la Universidad de Gaza, donde impartió clases y llegó a ser decano.
Fue el primer y último primer ministro electo de Palestina, fue más tarde jefe del gobierno de Gaza y desde 2017 jefe de la oficina política de Hamás, que es el mayor partido político y fuerza de resistencia en Palestina. Desde 2019 Haniyeh vivía fuera de Gaza, responsable de las relaciones internacionales y de las “negociaciones” con los colonialistas. El exterminio del negociador sentado al otro lado de la mesa también es contrario a la más antigua de las morales humanas.
Antes de asesinarlo, la organización criminal había asesinado a tres de sus hijos, cuatro de sus nietos, dos hermanos y decenas de miembros de su familia extensa. El exterminio selectivo de los hijos y nietos del enemigo es un comportamiento ajeno a la moral humana.
Eligieron asesinarlo en suelo iraní para provocar una vez más al país que se mantiene firme frente a los imperialistas occidentales y ayuda constantemente a la resistencia de todos los pueblos. Es obvio que Estados Unidos, la OTAN e “Israel” no tienen ningún interés en negociar una paz duradera en la región.
Después de la visita del criminal de guerra Benjamin Netanyahu a Estados Unidos, recibido calurosamente por Joe Biden y el Congreso estadounidense, está claro que Estados Unidos busca una guerra más amplia en la región que incluirá no solo el exterminio total del pueblo palestino y la ocupación del Líbano, sino también la aniquilación de un Irán soberano e independiente, lo que, como ellos mismos saben, debido a su tamaño y población, no se puede hacer por medios convencionales. Se están preparando para infligir lo peor a los pueblos de Asia occidental, y nosotros debemos estar preparados para resistir y ganar. Sólo la derrota de los Estados Unidos y sus aliados en sus aventuras bélicas puede salvar a la humanidad.